La
dictadura aprieta al pueblo.
LOS VENEZOLANOS VIVEN
LOS PEORES MOMENTOS DE SU HISTORIA REPUBLICANA
Las Fuerzas Armadas en cualquier
país donde impere un sistema democrático, son leales a la Constitución,
resguardan la soberanía y protege a la nación de cualquier intromisión de otros
países en su territorio.
En
los años 60, Fidel Castro invadió a Venezuela matando policías, guardias
nacionales, asaltando aviones comerciales, el barco Anzoátegui, robando bancos,
quemando fábricas, dinamitando oleoductos y plantas eléctricas. Mató a mujeres
y niños en el tren “El Encanto” en
septiembre de 1963 buscando sacar del poder al presidente Rómulo Betancourt,
elegido democráticamente en 1958, pero en ese tiempo se encontraron los
invasores con una FAN que luchó contra ellos y los derrotó.
Los
militares leales a la Constitución, familiares de soldados caídos a manos de los cubanos, cómo se sentirán
cuando oyen al presidente ilegitimo Nicolás Maduro decir: “Donde ataca la burguesía cuando
trata de buscar un traidor entre nuestras filas militares es en la moral. Ellos
se tienen que estrellar contra el muro poderoso de la lealtad bolivariana y chavista de toda la FANB, con su comandante
en jefe, hoy en funciones” (¿Maduro o Cabello?). En los pasillos de los
cuarteles reconocen como “Comandante en Jefe” a Diosdado, no Nicolás por ilegitimo.
Yo
pensaba, ustedes también, por supuesto, que la FANB eran el pilar fundamental
de la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela que en su artículo 328 dice que es una institución profesional, sin
militancia política, con la finalidad de garantizar la independencia y
soberanía de la Nación. Además, están al servicio de la nación y en ningún caso
al de persona o parcialidad política alguna.
Pero esa Constitución es violada
constantemente por sus creadores. Prácticamente existe otra creada a través de
decretos leyes, que entre otras barbaridades jurídicas, sirve para mantener y rendirles
pleitesía a los militares cubanos que el 8 de mayo del 1967 con guerrillas comunistas y espías comandados
desde Cuba por Fidel Castro, desembarcaron en la playa de Machurucuto en el
estado Miranda.
El Ejército de Venezuela y La Guardia Nacional los
encontraron el 10 de mayo luego de que pobladores de la región avisaran a
estos, empezó una lucha que se prolongó
hasta la madrugada del 11 del mismo mes y fueron capturados dos guerrilleros y el resto
dados de baja en la batalla. Esa era nuestras Fuerzas Armadas, las que defendían el territorio
patrio, no estas que convive con guerrilleros de la FARC colombiana y permite que
los militares cubanos que mataron a soldados venezolanos, les den órdenes
dentro de los cuarteles.
La revolución comunista que hoy
“desgobierna” a Venezuela, no se queda nada más con la sumisión y obediencia
total a los Castros, sino que llega a defender públicamente a uno de los terroristas
y asesino más peligroso del mundo, al ciudadano venezolano, Ilich Ramírez, (El
Chacal), que está siendo juzgado en Francia.
Por todo esto y mucho más,
Venezuela está viviendo los peores momentos de su historia; en este país pensar
diferente a los jerarcas del gobierno es un delito que se paga con cárcel y…
cuidado, va llegar el momento de pagar,
incluso con la vida. Por eso la necesidad de continuar la lucha, pacífica,
democrática, pero firme, porque no se puede permitir que una dictadura de esta
naturaleza se instaure en el país por mucho tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario