lunes, 23 de diciembre de 2013


En Navidad debe consolidarse la unión.
El  pueblo  espera  ley de amnistía para los presos políticos



En las navidades celebramos el nacimiento del Hijo de Dios, siendo en el mundo Cristiano una de las festividades más entrañables y llenas de significado para el espíritu humano. En Venezuela, igual que en la mayoría de los países que la celebran, la Navidad es motivo de encuentros familiares, brindis por la paz y la prosperidad y en estos momentos, por la reconciliación de una nación que está fracturada en dos pedazos.

Se brinda porque los hijos, hermanos, padres que están en las cárceles pagando condena por causas políticas o exiliados, regresen a sus hogares para darse ese abrazo de felicidad, de unidad familiar y pedir al nuevo año que les traiga esa tranquilidad, que en un momento de sus vidas perdieron por no comulgar con las ideas del gobierno.  
En estos días hasta el clima se suaviza, tal vez por eso el presidente asumió un gesto de encuentro con la otra parte que lo adversa, el cielo es transparente ¡ojala Maduro también lo sea!, nuestros árboles florecen, vemos impregnados de orgullo, de alegría, a nuestro Araguaney colmado de flores amarillas.
Como dijera uno de esos poetas populares que tanto abundan en  nuestra tierra: Amarillo es el color/ y el color es amarillo/ porque de amarillo el sol/ tienen rayos que dan brillo/amarillo es el anillo/ del más elocuente Rey/ amarillo es el mamey y la aurora boreal/ y en nuestra patria natal… la flor del Araguaney.


Los centros de compras, avenidas, plazas, zonas comerciales, casas particulares, son adornados con múltiples luces, nacimientos y pinos, copiosamente decorados. En Navidad Venezuela se viste de fiesta y se engalana con su mejor ambiente… es época de sabor y festejo, de reunión y encuentros, de calidez y felicidad.
De esa calidez y felicidad de la que muchas familias no han podido disfrutar durante muchos años, porque sus más cercanos miembros están presos o en el exilio  por no comulgar con las ideas del régimen, de allí la necesidad de una amnistía general, para que vuelvan a sus hogares a disfrutar de esas felicidades a la que todos tenemos derecho.
Las manifestaciones que se expresan en navidad, se extienden hasta enero: los aguinaldos, el pesebre, las gaitas, las misas de aguinaldos, la cena navideña, las parrandas, las paraduras del niño, las patinatas, el día de los inocentes, el de Los Reyes Magos y en algunas partes como en Cumaná capital del estado Sucre, finalizan las festividades el 21 de enero día de Santa Inés.  

En estas líneas he querido comentar  un poco esta emoción colectiva que penetra en el pueblo venezolano en navidad. Si te encuentras en Venezuela o piensa venir, seguro vas a disfrutar de la energía de nuestras fiestas que la llevamos en el alma y en el corazón. A usted queridísimo lector, que está leyendo este blob en cualquier parte del mundo, le deseo desde lo más profundo de mi corazón “una Feliz navidad y un Prospero año nuevo”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario